No pudo ser. La carrera por la capitalidad de la Cultura Europea por parte de Cáceres se ha difuminado. Un fuerte pesar en nuestra ciudad después de la decisión por parte del jurado. Pero después de esto debemos tener la cabeza muy alta, se ha trabajado, toda Extremadura ha sentido a Cáceres como el centro cultural de Europa y que nos quiten lo bailao. Mientras hemos estado, hemos tenido ilusión y yo soy de los que pienso que en los momentos de ilusión es cuando el ser humano se siente mejor, o por lo menos, a mí me pasa. Cáceres tiene el reconocimiento de toda Extremadura, Cáceres es un enclave cultural básico para Extremadura y Cáceres con o sin capitalidad siempre será PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD.
Deseo que sea. Si yo fuera uno de los que pudiera elegir mañana entre Trini y Tomás, me decisión estaría hacia el lado de Tomás. Y simplemente porque veo en la opción de Tomás una postura cercana a las bases, esas bases, que a mi parecer, todos los partidos olvidan y sólo piensan en ellas cuando llega la hora de elecciones y se llama a los afiliados para pegar carteles, buzonear y dedicarlos a tareas de intendencia y darles la banderita de turno para enarbolarla en los mítines y actos públicos.
Ya mantuve en este blog mi postura al respecto. Con todo el derecho que pudiera tener Trini a ser candidata me parecía un atraco y un ataque por la espalda a alguien, Tomás, que venía trabajando fuerte contando con las bases. Un ataque con el apoyo del aparato que ha hecho que Tomás, frente a la adversidad, cogiera más fuerza, siendo capaz de revelarse y plantándole cara hasta al mismísimo Secretario General del Partido.
Cáceres no pudo conseguir la capitalidad; a ver si Tomás consigue la candidatura para enfrentarse a Esperanza por la Comunidad de Madrid.
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