miércoles, 29 de diciembre de 2010

Veiga: la dignidad en política


Cuando hoy a través de los medios me he enterado de la muerte de Manuel Veiga López he sentido la pérdida de alguien que ha dignificado la política en Extremadura. Y la ha dignificado desde las multiples responsabilidades que le tocó dirigir, desde la Universidad, desde la Diputación Provincial de Cáceres, desde la Asamblea de Extremadura.
Veiga dignificó la política, la política con mayúsculas, la política de la honradez, la de la responsabilidad, la política del bien común.
Extremadura y la provincia de Cáceres debe estar agradecida a Manuel Veiga, agradecida a este salmantino de nacimiento y extremeño de corazón por su obra y por su saber estar.
Que su ejemplo sea modelo para los políticos que hoy dirigen nuestras instituciones.

lunes, 27 de diciembre de 2010

A apretarse el cinturón

No ganamos para sustos. Tras el recorte en la extraordinaria de Diciembre, hoy víspera de los Santos Inocentes, nos ha vuelto a dar un zarpazo, sube la luz y el gas, más las subidas que se anunciarán en días sucesivos. Y este zarpazo nuevamente no es para los más poderosos, es para el común de los mortales, es para los que tenemos contratado más de 3´3 kilovatios, para los que tenemos calefacción de gas natural, vamos unos poquitos.
No se dan cuenta que a mayor presión en impuestos posiblemente optemos por menos consumo. ¿Se han puesto a pensar que con menos de 3,3 kilovatios contratados no enciendes más, en tu casa, que unas bombillas y algún que otro aparatejo?. Si compramos lavavajillas, aparatos de aire acondicionado, vitrocerámicas, planchas, etc, se supone que los vamos a poner en marcha y con menos de 3,3 es imposible que todos trabajen a pleno rendimiento. ¿O es que quieren que nos apretemos el cinturón y no consumamos y dejemos en las tiendas esos electrodomésticos tan buenos que facilitan las tareas domésticas y así conseguir que caiga el consumo en España a una marcha más acelarada a como lo está haciendo ya?.
Recuerdo que cuando, por parte del gobierno se empezó a reconocer que había crisis, un dirigente autonómico pedía, a los que poseían un puesto de trabajo, que optaran por el consumo y en ese momento entendí que era lo normal, que los que manteníamos un puesto de trabajo debíamos mantener el consumo, pero lo que no me dijo, ese mismo dirigente, es que nos iban a bajar el sueldo, que nos iba a subir la luz, el gas, los impuestos y así me parece a mí que ni los que pierden el empleo, ni los que lo mantienen están dispuestos a seguir consumiendo pues tenderán a pensar más sus gastos por lo que pueda venir.
Difícil cuesta de enero.