Tiempo para proponerte algo

Cuando llega septiembre y volvemos tras el verano a la normalidad nos ocurre algo parecido a lo que sucede cuando comenzamos un año nuevo, nos proponemos cosas y proyectos que en unos casos se consiguen y en otros quedan abandonados hasta mejor ocasión. Las intenciones iniciales son buenas pero el día a día van dando al traste a esas aspiraciones. Pero lo importante es proponerse cosas, quizás no de forma ambiciosa para que además de la actividad laboral de cada uno, dediquemos algo de nuestro tiempo a cosas que nos satisfacen, a actividades que nos hacen olvidar el día a día cotidiano, a actividades que hacen desarrollar nuestras cualidades ocultas, y si estas cualidades redundan en beneficio de la colectividad, mejor que mejor.
La música, el deporte, el senderismo, la micología, escribir, la fotografía, la pertenencia a asociaciones etc son algunos de esos objetivos que nos pueden ayudar a distraernos y olvidarnos un poquito de la voragine del día a día,  y si estas actividades las haces con otros, mejor que mejor, pues el encuentro y la buena compañia aseguran el éxito de la actividad.
Claro está, que como todo en la vida, estas actividades exigen disciplina, esfuerzo, predisposición y acuerdo, valores muy necesarios en la sociedad actual.
Te animo a que te propongas algo, seguro que con los logros que consigas te vas a alegrar.